
Las personas institucionalizadas en residencias de ancianos han sido uno de los grupos más vulnerables a la pandemia de COVID-19 en nuestro país. Algunos informes hablan de más de 20.000 fallecidos solo durante la primera ola, con elevadas incidencias de enfermedad en este grupo. En este trabajo tratamos de entender lo ocurrido en las residencias de ancianos en Aragón durante la pandemia de COVID-19, analizando los factores asociados al riesgo de hospitalización y muerte en estos pacientes.
Observamos que, en Aragón, casi el 40% de las personas mayores de 64 años con un caso de COVID-19 confirmado que vivían en residencias fueron hospitalizadas. El riesgo de hospitalización fue mayor en hombres y personas de mayor edad. También se observaron desigualdades socioeconómicas, de modo que las personas con pensiones bajas tuvieron menor riesgo de ser hospitalizadas que las personas de pensiones altas, controlando por la morbilidad del sujeto. La existencia de comorbilidades también influyó en el riesgo de ingreso y muerte del paciente. Por último, hubo personas que fallecieron sin ingreso hospitalario. La hospitalización en fallecidos se asoció positivamente con ser hombre y con tener diabetes, obesidad o insuficiencia cardiaca. Por el contrario, las personas con demencia tuvieron un mayor riesgo de muerte sin ingreso.